Tipos de tiendas online
Las tiendas de comercio electrónico o tiendas online, pueden clasificarse en base a diversos parámetros, pero una de las clasificaciones más habituales es la realizada en base a si la tienda permite o no completar el proceso de compra de forma electrónica. En base a este criterio de clasificación podemos distinguir los siguientes tipos de tiendas de comercio electrónico:
- Tienda catálogo: contiene una colección de productos o servicios que el usuario puede consultar y navegar. El usuario puede examinar las características de los diferentes productos o servicios, obtener información detallada sobre los mismos, etc. pero no puede realizar pedidos de esos productos o servicios ni pagar esos pedidos desde la tienda de comercio electrónico. En estos casos, la tienda de comercio electrónico suele proporcionar información sobre el procedimiento que el usuario debe seguir para poder realizar un pedido (por ejemplo: a través del teléfono, fax, e-mail, etc.), así como información sobre las formas de pago que puede utilizar para abonar esos pedidos.
- Tienda virtual: también permite consultar las características de los productos o servicios ofrecidos por la tienda online, pero además permite realizar pedidos y pagar estos pedidos de forma electrónica desde la página web de la tienda online. Este tipo de tiendas suele disponer de un carrito de la compra al que el usuario va añadiendo los productos o servicios que desea adquirir y que formarán su pedido. Una vez finalizada la compra, el usuario confirma el pedido y escoge la forma de pago deseada entre las diferentes formas de pago soportadas por la tienda virtual: contra reembolso, transferencia bancaria, tarjeta bancaria de cŕedito o débito, Paypal, pago y recogida en una tienda física, etc.
A continuación, se muestran las principales ventajas de una tienda de comercio electrónico de tipo catálogo frente a una tienda de tipo tienda virtual:
- La tienda de tipo catálogo tiene una complejidad notablemente inferior a la de una tienda virtual.
- La tienda online de tipo catálogo, al no permitir el pago online de los productos o servicios, no requiere de las medidas de seguridad que sí necesita una tienda virtual para garantizar la seguridad de los pagos realizados.
- Las características anteriores hacen que la inversión necesaria para la creación de una tienda online de tipo catálogo sea bastante inferior a la necesaria para la creación de una tienda virtual.
- La tienda online de tipo catálogo permite dar un primer paso hacia una tienda virtual con una inversión inferior, permitiendo medir la respuesta del público hacia la tienda online antes de realizar una inversión mayor para convertir esta tienda de tipo catálogo en una tienda virtual.
Por contra, una tienda de comercio electrónico de tipo tienda catálogo, tiene la principal desventaja de que no permite completar el proceso de compra en la propia página web, al no permitir la realización de pedidos ni el pago de los mismos desde la propia tienda online. Esto impide que el propietario de la tienda online pueda beneficiarse de muchas de las ventajas de poseer una tienda online, que ya hemos mencionado en otras entradas de este blog: automatización del proceso de compra, reducción de costes de gestión, reducción de costes de personal, registro electrónico del proceso de compra y de toda la información relacionada, obtención de estadísticas y estudios de mercado sobre los clientes de la tienda virtual, etc.
La complejidad de una tienda de comercio electrónico de tipo tienda virtual depende en gran medida de las formas de pago que implemente. Si una tienda virtual no implementa métodos de pago que impliquen realizar transacciones electrónicas, su complejidad será mucho menor y los requisitos de seguridad que debe soportar serán muy inferiores, reduciéndose a tener que garantizar la seguridad de los datos personales de los clientes. En cambio, si una tienda virtual implementa métodos de pago que realizan transacciones electrónicas, deberá además garantizar la seguridad de esas transacciones y deberá integrarse con diferentes pasarelas de pago, incrementándose notablemente su complejidad. Así, por ejemplo, una tienda virtual que sólo permita el pago contra reembolso o mediante transferencia bancaria será mucho más sencilla que una que además permita el pago mediante tarjeta de crédito/débito.
Lo mismo ocurre con el proceso de realización de los pedidos: una tienda virtual en la que para realizar un pedido el usuario tiene que enviar un e-mail o cubrir un sencillo formulario describiendo los productos o servicios que desea adquirir, será mucho menos compleja que una tienda virtual en la que el usuario dispone de un carrito de la compra al que puede ir añadiendo productos o servicios con un simple click de ratón.
Comentarios
Publicar un comentario